¿Qué está ocurriendo en el centro de menores Marcelo Nessi? esa es la pregunta que durante mucho tiempo se hicieron los padres de un interno del centro...
Un joven de 17 años intentó suicidarse en el centro de menores Marcelo Nessi de Badajoz. Los educadores de la institución pública, que pertenece a la Junta de Extremadura, encontraron al menor en su habitación con la cara morada colgado de una rejilla que hay junto a la puerta y dieron aviso al servicio de urgencias 112.
Inconsciente, fue trasladado al Hospital Infanta Cristina de Badajoz, donde ingresó en Urgencias al sufrir una parada cardiorespiratoria. El chico pasó bastante tiempo en observación en la UCI de dicho centro pacense.
Para el intento de suicidio utilizó varias prendas de vestir, con las que rodeó su cuello antes de subir a un mueble de su propia habitación del centro para provocarse la asfixia.
Los educadores habían acudido a la habitación del joven de forma circunstancial para avisarle de que tenía una llamada telefónica de su familia, cuando se encontraron con la escena.
El chico había ingresado sólo días antes en este centro de menores, que el pasado mes de octubre se vio envuelto en una gran polémica al descubrirse un vídeo donde se pudo ver una descomunal paliza de varios agentes de seguridad del centro contra un menor, que se encontraba atado de manos y pies, en una de las salas del recinto.
Un joven de 17 años intentó suicidarse en el centro de menores Marcelo Nessi de Badajoz. Los educadores de la institución pública, que pertenece a la Junta de Extremadura, encontraron al menor en su habitación con la cara morada colgado de una rejilla que hay junto a la puerta y dieron aviso al servicio de urgencias 112.
Inconsciente, fue trasladado al Hospital Infanta Cristina de Badajoz, donde ingresó en Urgencias al sufrir una parada cardiorespiratoria. El chico pasó bastante tiempo en observación en la UCI de dicho centro pacense.
Para el intento de suicidio utilizó varias prendas de vestir, con las que rodeó su cuello antes de subir a un mueble de su propia habitación del centro para provocarse la asfixia.
Los educadores habían acudido a la habitación del joven de forma circunstancial para avisarle de que tenía una llamada telefónica de su familia, cuando se encontraron con la escena.
El chico había ingresado sólo días antes en este centro de menores, que el pasado mes de octubre se vio envuelto en una gran polémica al descubrirse un vídeo donde se pudo ver una descomunal paliza de varios agentes de seguridad del centro contra un menor, que se encontraba atado de manos y pies, en una de las salas del recinto.
Ese vídeo verifica la violencia empleada por cuatro vigilantes de seguridad contra un joven interno, de 19 años, que cumplía condena desde hacía más de un año en el centro de reforma para menores delincuentes de Badajoz 'Marcelo Messi' ha desatado la polémica por la represión utilizada.
La brutal paliza difundida por el diario 'hoy.es' se produjo el pasado 28 de julio en la unidad de contención de dicho centro, en un cuarto de reducidas dimensiones en el que sólo se encuentra una cama. Tras la denuncia interpuesta por el afectado dos semanas después de lo sucedido, la Junta de Extremadura, de quien depende el centro, declaró entonces a través de un comunicado que los guardias jurados habían utilizado "medidas legales" para reducir al joven. Sin embargo, esta tesis se ha desmontado ahora con la prueba aportada por un anónimo, donde a través de un teléfono móvil reproduce la grabación efectuada por las cámaras de seguridad de la institución que grabaron los hechos.
Las imágenes, difundidas, muestran el momento en el que tres de los vigilantes sujetan al interno en el suelo, rodeándolo junto a la cama, mientras que el otro, que se encuentra de pie, lo golpea varias veces con la porra mientras el resto le pone las esposas en las manos y en los pies. Posteriormente, con el joven ya en la cama, y donde se ve claramente que tiene las manos esposadas a la espalda, un vigilante vuelve a golpearle la cara, esta vez con la mano.
El agredido estaba cumpliendo una condena de tres años en este único centro de reforma para delincuentes que existe en Extremadura e ingresó cuando era menor de edad, con 17 años.
"Yo sé que mi hijo ha tenido problemas, que no ha sido un buen niño, que ha tenido sus errores, pero a nadie se le puede tratar así, como a un animal, eso no se le puede hacer ni al peor hijo del mundo", declara la madre del joven, Visi Guerrero, aún conmocionada cuando los periodistas le enseñaron el vídeo con su hijo en el suelo recibiendo las agresiones.
"Él me contó, después de que nosotros le insistimos mucho, que le habían pegado y así lo comprobamos el primer día de visita que acudimos al centro tras los hechos; tenía moratones por todo el cuerpo, sobre todo de cintura para abajo, además, al hacer calor, sólo llevaba puesto un pantalón de verano, por lo que apenas tuvo protección", comenta la madre.
Ese mismo día, su hijo, terminó por reconocerle a sus padres que, aunque no con tanta agresividad, en otras dos ocasiones más le habían maltratado en el centro. Sin embargo, desde que ocurrió esta paliza hasta la fecha ya no ha tenido más problemas de este tipo, según la versión de la madre. "El resto del personal siempre se ha portado bien con él", destaca.
Según esta versión, el agredido pidió que le trasladaran a la enfermería, pero los responsables del centro se negaron por lo que tras pasar dos semanas sin volver a tener noticias de la dirección tomó la postura de denunciar los hechos. También cuenta que intentaron buscar una explicación oficial a lo sucedido, pero ni los responsables del centro ni de la Junta de Extremadura les han comunicado a día de hoy nada al respecto. "Sólo el día que fuimos a visitarle y comprobamos las heridas nos dijeron que la ley les otorgaba el derecho a reducirlo porque los que están allí ingresados son muy agresivos, vamos que era una cosa normal, pero yo creo que a mi hijo lo han tratado como a un animal".
Sin embargo, se ha sabido que el vigilante que más se ensañó con el joven ha sido apartado de su trabajo, aunque no los otros tres que colaboraron en la paliza, y a los que la Fiscalía de Menores encargada del caso investiga la identidad de estos agresores.
Precisamente, Sonia Gandolfo, la fiscal de Menores encargada del caso, junto a un Juzgado de Badajoz, señaló que se quedó "aterrada" al comprobar las imágenes de la paliza y destacó que "estas personas –en referencia a los guardias de seguridad- no pueden ni deben trabajar en el centro, que debe de estar para reeducar y resocializar a los jóvenes con problemas, y lo que he visto no se corresponde con ese fin, espero que la dirección del centro tome las medidas oportunas al respecto".-añadió la fiscal.
También confesó que a pesar de la polémica montada, ni la Consejería de Igualdad y Empleo de la Junta de Extremadura ni la propia dirección del centro se han puesto en contacto con este organismo para interesarse por las investigaciones del caso.
Por su parte, la delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira, señaló que la Junta de Extremadura ha actuado "como corresponde, es decir, con mucho respeto, mucha prudencia y mucha delicadeza, ofreciéndole amparo al joven cuando se conocieron los hechos para que se presentase la correspondiente denuncia".
Pero...al conocer este caso la pregunta es la siguiente... ¿se sigue usando el método de agresión y disciplina a partir del maltrato físico en centros como este? ¿cómo pueden tratar de reeducar a jóvenes utilizando métodos de los que en realidad se les intenta apartar a los propios chicos?
La brutal paliza difundida por el diario 'hoy.es' se produjo el pasado 28 de julio en la unidad de contención de dicho centro, en un cuarto de reducidas dimensiones en el que sólo se encuentra una cama. Tras la denuncia interpuesta por el afectado dos semanas después de lo sucedido, la Junta de Extremadura, de quien depende el centro, declaró entonces a través de un comunicado que los guardias jurados habían utilizado "medidas legales" para reducir al joven. Sin embargo, esta tesis se ha desmontado ahora con la prueba aportada por un anónimo, donde a través de un teléfono móvil reproduce la grabación efectuada por las cámaras de seguridad de la institución que grabaron los hechos.
Las imágenes, difundidas, muestran el momento en el que tres de los vigilantes sujetan al interno en el suelo, rodeándolo junto a la cama, mientras que el otro, que se encuentra de pie, lo golpea varias veces con la porra mientras el resto le pone las esposas en las manos y en los pies. Posteriormente, con el joven ya en la cama, y donde se ve claramente que tiene las manos esposadas a la espalda, un vigilante vuelve a golpearle la cara, esta vez con la mano.
El agredido estaba cumpliendo una condena de tres años en este único centro de reforma para delincuentes que existe en Extremadura e ingresó cuando era menor de edad, con 17 años.
"Yo sé que mi hijo ha tenido problemas, que no ha sido un buen niño, que ha tenido sus errores, pero a nadie se le puede tratar así, como a un animal, eso no se le puede hacer ni al peor hijo del mundo", declara la madre del joven, Visi Guerrero, aún conmocionada cuando los periodistas le enseñaron el vídeo con su hijo en el suelo recibiendo las agresiones.
"Él me contó, después de que nosotros le insistimos mucho, que le habían pegado y así lo comprobamos el primer día de visita que acudimos al centro tras los hechos; tenía moratones por todo el cuerpo, sobre todo de cintura para abajo, además, al hacer calor, sólo llevaba puesto un pantalón de verano, por lo que apenas tuvo protección", comenta la madre.
Ese mismo día, su hijo, terminó por reconocerle a sus padres que, aunque no con tanta agresividad, en otras dos ocasiones más le habían maltratado en el centro. Sin embargo, desde que ocurrió esta paliza hasta la fecha ya no ha tenido más problemas de este tipo, según la versión de la madre. "El resto del personal siempre se ha portado bien con él", destaca.
Según esta versión, el agredido pidió que le trasladaran a la enfermería, pero los responsables del centro se negaron por lo que tras pasar dos semanas sin volver a tener noticias de la dirección tomó la postura de denunciar los hechos. También cuenta que intentaron buscar una explicación oficial a lo sucedido, pero ni los responsables del centro ni de la Junta de Extremadura les han comunicado a día de hoy nada al respecto. "Sólo el día que fuimos a visitarle y comprobamos las heridas nos dijeron que la ley les otorgaba el derecho a reducirlo porque los que están allí ingresados son muy agresivos, vamos que era una cosa normal, pero yo creo que a mi hijo lo han tratado como a un animal".
Sin embargo, se ha sabido que el vigilante que más se ensañó con el joven ha sido apartado de su trabajo, aunque no los otros tres que colaboraron en la paliza, y a los que la Fiscalía de Menores encargada del caso investiga la identidad de estos agresores.
Precisamente, Sonia Gandolfo, la fiscal de Menores encargada del caso, junto a un Juzgado de Badajoz, señaló que se quedó "aterrada" al comprobar las imágenes de la paliza y destacó que "estas personas –en referencia a los guardias de seguridad- no pueden ni deben trabajar en el centro, que debe de estar para reeducar y resocializar a los jóvenes con problemas, y lo que he visto no se corresponde con ese fin, espero que la dirección del centro tome las medidas oportunas al respecto".-añadió la fiscal.
También confesó que a pesar de la polémica montada, ni la Consejería de Igualdad y Empleo de la Junta de Extremadura ni la propia dirección del centro se han puesto en contacto con este organismo para interesarse por las investigaciones del caso.
Por su parte, la delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira, señaló que la Junta de Extremadura ha actuado "como corresponde, es decir, con mucho respeto, mucha prudencia y mucha delicadeza, ofreciéndole amparo al joven cuando se conocieron los hechos para que se presentase la correspondiente denuncia".
Pero...al conocer este caso la pregunta es la siguiente... ¿se sigue usando el método de agresión y disciplina a partir del maltrato físico en centros como este? ¿cómo pueden tratar de reeducar a jóvenes utilizando métodos de los que en realidad se les intenta apartar a los propios chicos?
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